El presente informe surge a raíz de la recepción y acompañamiento de casos que lleva Cristosal, donde se registran niñas, niños, adolescentes y jóvenes en contextos de desplazamiento forzado interno a causa de la violencia generalizada. De cara a los 28 años de la Convención sobre los Derechos del Niño, el Estado salvadoreño se encuentra preparado para brindar respuesta ante hechos de violencia, desde esta perspectiva, Cristosal analiza las condiciones del ejercicio de los derechos humanos de las niñas, niños, adolescentes y jóvenes, las condiciones de vulnerabilidad a las que están expuestos y el rol del Estado ante la negativa del reconocimiento del desplazamiento forzado interno.
El informe realiza un análisis desde la legislación específica y las políticas públicas, revisando si estos brindan lineamientos claros para el abordaje de niñez y adolescencia víctimas de violencia, y si las autoridades brindan una atención a los casos de desplazamiento forzado. Desde este análisis y dando seguimiento a las recomendaciones de la Relatora Especial Cecilia Jiménez-Damary, quien además de expresar la necesidad de que el Gobierno reconozca la magnitud del desplazamiento forzado interno y la necesidad de que actúe para enfrentar el fenómeno, manifestó que “los jóvenes son particularmente afectados por la violencia”. Para visibilizar el impacto caótico que esta situación genera en la vida de niños, niñas, adolescentes y jóvenes, junto a sus familias, se han preparado seis apartados para profundizar en este estudio de caso.
El primer apartado, “La situación de la violencia generalizada contra niños, niñas, adolescentes y jóvenes” recaba información estadística de diferentes fuentes oficiales y de otros estudios sobre el tema, que ofrecen una imagen actual del panorama de violencia criminal del que están huyendo. El segundo apartado, “Aspectos de preocupación”, expone los datos de la base de datos de Cristosal. Desarrolla los elementos centrales que describen cómo viven el desplazamiento los NNAJ de 0 a 25 años, entre el período de enero de 2016 a marzo de 2018. Los principales hechos de violencia y perpetradores que generan el desplazamiento, el impacto social que este genera en sus vidas y las de sus familias, la vinculación de su desplazamiento forzado con la migración, entre otros aspectos, cuantifican la realidad del fenómeno tal como lo viven las víctimas asistidas por Cristosal.