El Sistema de Protección Civil (en adelante, el Sistema) nace bajo la necesidad no solo de responder de manera reactiva a los desastres naturales, sino de adelantarse a estos a través de la planificación preventiva de acuerdo con las dinámicas que presentan las condiciones meteorológicas de la ubicación geográfica del país. Este se divide en comisiones a nivel nacional, departamental, municipal y comunal. Estas clasificaciones son importantes maneras de garantizar el flujo adecuado de información y recursos entre el gobierno central y las autoridades y comunidades locales. Sin embargo, existe un contraste entre los ámbitos en los que el Sistema debería tener un alcance efectivo, según la normativa que le rige, y las experiencias de comunidades en situación de riesgo a partir del funcionamiento de este en diferentes momentos.